sábado, 28 de agosto de 2010

Utopía del polvo de los muertos. Oswaldo Pérez Cabrera


En una bodega vacía se guardan los recuerdos de una ciudad pérdida. El vodevil de nuestra imaginación ya echada a perder. Hartos de comer productos expirados y dietas que se arrastran por el mugriento suelo lodoso del hospital abandonado. El aire ha tomado una coloración café, prueba irrefutable del veneno que flota en nuestros pulmones y nos contamina la sangre. La esperanza de vida ya ha perdido su condición positiva. La vejez está en peligro de extinción. El cielo se cierra arriba con formaciones cumulosas de coloraciones ácidas. Don Muerto alucina con el vistazo futuro. Se pregunta si evolucionará la coraza humana para resistir la radioactividad y los mortales rayos de luz solares. Si se descubrirá vacuna contra el virus que los convierte en seres de mercurio emplumados. Las primeras mutaciones genéticas. ¿Hasta dónde llegarán? Don Muerto podría vislumbrar para ver que pasaría después de estas escenas de oxido, herrumbre, metales rancios, hombres viviendo en cuevas de alambre retorcido, bodegas, espacios de concreto quebrado, desiertos de hormigón. Paro algo capta la atención de Don Muerto. Un minicorpúsculo. Una partícula de polvo.

Maldito polvo. Último destino de nuestra carne, de nuestra humanidad. La prueba de la desintegración. Aunque tenga formas diferentes seguirá siendo una partícula nociva, aunque para seres como Don Muerto que puede empequeñecer a niveles microscópicos en donde una partícula de polvo se convierte en un universo en sí, el maldito polvo no pierde su condición de polvo. Si le quitas las capas al polvo, seguirás descubriendo más y más capas, más pequeñas cada vez. La infinidad también va hacia abajo, siempre habrá algo más pequeño y más y más y más y más y más y más y más y más y más y más y más aunque nuestros sentidos en turno no logren percibirlo, siempre habrá un reino dentro el reino aunque sean imperceptibles y siempre habrá algo más grande y más y más y más y más y más y más y más y universos dentro de universos. Don Muerto se mal viaja otra vez con el descubrimiento de otro secreto vedado. Se agarra del polvo que flota conteniendo mundos dentro de sí.

La nostalgia también se transpola a las otras dimensiones. Don Muerto siente como ganas de regresar a ser un conjunto de polvo, de ser un macropolvo, una simbiosis de polvo que contenga su conciencia. El mundo tridimensional tiene sus cosas buenas a pesar de todo. Hay muchos sentimientos que ahora son racionalizados en lugar de experimentados. Don Muerto aquí en el polvo ve un mundo color humo, humo sólido, seres que parecen amibas con múltiples ojos y de color gris, Don Muerto cree que es un color parecido al gris. ¿Qué verán a través de sus ojos? ¿Se percatarán de las conciencias que los rodean? ¿comerán algo en está flora polvorienta? ¿Sabrán que flotan en un universo que estuvo a punto de ser destruido? Y si se puede reencarnar en alguna criatura diferente. Don Muerto podría ser polvo, polvo de estrellas es la tierra de donde él viene, polvo sale de su cuerpo que era de carne y hueso, de agua y vísceras, máquina asquerosa.

El polvo flota entre el basurero industrial de la ciudad olvidada, entra en la bodega para descansar en un mueble viejo junto con otros miles de granos de polvo. Migajas de algo que fue. De algo más grande con diferente forma. Don Muerto reposa. Universos solapándose al unísono. Qué caos tan perfecto. Don Muerto reposa.

Don Muerto

domingo, 22 de agosto de 2010

el blog de La Fanzine cumple un año


El 11 de agosto de 2009 nació este blog. Desde entonces, casi trescientas entradas, 200 colaboraciones, tres números en papel y un cuarto en camino (si quieres participar en el cuarto, estás a tiempo, pulsa aquí), fiestas, presentaciones y muchos muy buenos ratos... de noches sin dormir maquetando (collageando) entre risas y música sesentera...
Mucho celo, mucha grapa, muchas ganas, muchas fotocopias, y todo, como tiene que ser, ¡por amor al arte!

Porque La Fanzine NO tiene publicidad, ni ayudas económicas de ningún tipo y,
por supuesto, es gratuita.

¡Larga vida a La Fanzine!

domingo, 1 de agosto de 2010

El Cornelismo. Sir G

"Duerme, Cornelio, y prepárate para el invierno cuando no estemos nosotros que aún velamos por ti. Vendrá primero la luz enceguecedora y fulminante, a la que seguirá la noche más larga y oscura. Al amanecer emprenderás tu camino hacia la reconquista de lo que quede en este lugar”.
"El cornelismo es una línea de pensamiento pesimista frente futuro de la especie humana, que sueña con un planeta sin seres humanos y dominado por una nueva especie. Ésta es el Simio Pensante, la única especie inteligente, además del hombre, capaz de salvar del caos al planeta cuando éste deje de existir."
"Los cornelistas esperamos con deseo la extinción de la especie humana para que sea relevada por la especie de los simios pensantes como dominadores del planeta. Los cornelistas creemos que la especie humana está condenada a una inminente auto-destrucción. Los simios pensantes encarnan la esperanza de una vida inteligente en el planeta tras la desaparición del ser humano. Por esta razón, tras las campañas de aniquilamiento, la decena de simios pensantes que aún queda desperdigada por el planeta es cuidada con celo por cornelistas elegidos. Arriesgan sus vidas, son traicionados y exterminados los cornelistas elegidos. Pero no les importa. No existe el futuro como especie y mientras más pronto se llegue al final más cerca se estaremos de la Nueva Era. La verdadera Nueva Era limpia de seres humanos.





Un poco de historia del cornelismo


Si bien los simios pensantes que quedan con vida son varios, el movimiento inspiró su nombre en el caso más popular de persecución que los medios masivos recogieron. Cornelio y la actitud heroica del investigador y científico argelino Abdelhamid Laarej, en cuyo laboratorio se dio origen a la futura especie dominadora del planeta. Cuando empezaron a hacerse conocidos los experimentos y resultados del grupo de investigación que el profesor Laarej dirigía, se desató una serie de debates y polémicas entre los estudiosos y sabios del ramo en una línea más bien ética, para acabar focalizándose en la necesidad o no de cuidar y fomentar una especie que reemplace al Ser Humano cuando éste deje de existir. Por un lado, la reacción y rechazo ante esta posibilidad que la mayoría entendió como aberrante y dislocada. Por el otro, los que vieron al Simio Pensante como una alternativa acertada cuando la especie humana se extinga para, de este modo, no dejar al planeta sumido en el completo caos sin una especie inteligente que lo habite. En estas circunstancias, el tema llegó a oídos oficiales quienes, presionados por fuerzas diplomáticas extranjeras, intentaron por todos los medios posibles de hacerse con los ejemplares que guardaba el doctor Abdelhamid Laarej para una posterior eliminación. Antes de que irrumpieran en su laboratorio, había conseguido poner a resguardo a algunos de los Simios Pensantes, lo cuales fueron enviados secretamente a científicos favorables a la preservación de esta especie. El profesor perdió la vida por poner a salvo al último simio que logró sacar de su laboratorio, Cornelio, quien, finalmente, sobrevivió y se encuentra en paradero desconocido. Dado que muchos de los involucrados directos o indirectos en la historia no son personas anónimas y que la figura del científico argelino era conocida y respetada tanto en su país como en numerosos círculos internacionales, esta historia salto a la luz pública y fue recogida por los medios de comunicación de masas. Y, como la historia se presta para la polémica y contiene todos los ingredientes para despertar curiosidad y desatar temores sociales, el tema pasó a ser de dominio público y dividió a los seguidores del caso, como en su momento lo hizo con los científicos e investigadores, en seguidores y detractores. Es cuando las revistas no especializadas intentaron definir el movimiento como un fenómeno social adolescente de pesimismo futurista y lo etiquetaron con el nombre del Simio Pensante más famoso: Cornelismo.

Sir G.

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
Las opiniones y los comentarios emitidos en este blog por las personas que en el mismo colaboran, son emitidos, todos ellos y en cualquier formato, a título personal por los diferentes autores. Este blog no suscribe ni secunda necesariamente cuanto en él se exprese.



La Fanzine en Facebook